viernes, 11 de noviembre de 2011

2011-2015

Lo que viene es más Estado policial, más control, más 'blue'

En medio de la corrida cambiario/bancaria se está dirimiendo una formidable disputa en el Frente para la Victoria por el futuro de la economía en el período presidencial que comienza.
06/11/2011 | 20:40
  • PUBLICADO EN URGENTE 24.COM
Lo que viene es más Estado policial, más control, más 'blue'
Apreciados dólares estadounidense.

por CLAUDIO M. CHIARUTTINI
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Sin Saco y Sin Corbata - Radio El Mundo). Hace 2 semanas, Cristina Fernández celebraba su reelección con más de 54% de los votos. Hoy, en vez de degustar las repercusiones locales del encuentro con Barack Obama, la Presidente de la Nación está tratando de ver cómo resuelve el entuerto económico que armaron las personas de más confianza que la iban a acompañar en el inicio de su segundo mandato consecutivo.
Además de recelar de su entorno y tener que reelegir, quizás, al reemplazante de Amado Boudou en el Palacio de Hacienda, Cristina Fernández deberá

> frenar la fuga de divisas
que se mantiene,

> desmantelar la sensación de “Estado Policial” creado en la City porteña,

> evitar que se espiralice el incipiente retiro de depósitos en dólares,

> recrear la confianza que el votante le entregó hace dos semanas y

> demostrar que ella tiene la capacidad de superar problemas estructurales y macroeconómicos.
Si algo dejó en claro esta semana de intervención de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip). es que ante cada barrera que se le impone al mercado, el mercado encuentra su curso para seguir operando. 
Al principio, con dificultad, con torpeza, hasta con temor, pero los operadores financieros, bancarios, bursátiles y cambiarios, a la larga, encuentran el pasaje para unir a las puntas vendedora y compradora de cualquier instrumento de inversión o bien. Por algo el mercado lleva 600 años de vida, creciendo, sufriendo crisis y recuperándose con más fuerza.
¿Qué llevó al gobierno a improvisar una operación policial en el mercado cambiario y crear un “corralito verde”? La seguridad de que la política puede dominar a la economía, una de las bases del pensamiento filosófico de Ernesto Laclau, uno de los ideólogos del populismo neomarxista latinoamericano que intenta encarnar el kirchnerismo cristinista.
En contra del neoliberal Bill Clinton, quien sostenía “es la economía, estúpido”, Cristina Fernández y su entorno creen que el llamado Modelo K ha triunfado estos 101 meses porque la política le dijo a la economía y a los operadores económicos qué deben hacer, cuándo necesitan concretarlo y cómo tienen que comportarse.
Curiosamente, este grupo prefiereç

> ignorar la inflación a favor de cebar el consuno
,

> tapar el déficit fiscal con manotazos a las reservas del Banco Central y la Anses,

> frenar el deterioro de la balanza comercial ordenando exportaciones compulsivas y

> hacer mucho marketing político.
¿Cuáles fueron las consecuencias? 
Por efecto de la inflación y el virtual congelamiento del tipo de cambio, el dólar se convirtió en una mercadería barata y la gente los comenzó a comprar, pero como las reservas del BCRA bajaron a causa de los aportes al Tesoro (ya que se perdió el superávit fiscal), la merma se hizo sentir y provocó las medidas anunciadas hace una semana. Ya que no alcanza con las exportaciones compulsivas para reducir el rojo de balanza comercial obligaron a mineras, energéticas y aseguradoras a ingresar los dólares de sus ventas externas.

Por ignorar las causas, confundieron las soluciones. 
Lo que no se llega a entender es por qué, si todos estos efectos fueron adelantado miles de veces por los economistas ortodoxos, los economistas heterodoxos no se dieron cuenta.

¿Serán heterodoxos idóneos o gente improvisado que se escuda en la heterodoxia para justificar su torpeza intelectual?
A partir de allí, se crea una paradoja: los efectos erróneos de las medidas anunciadas confirman que Cristina Fernández desconoce todo sobre la economía.

Aníbal Fernández cree que porque Ella consiguió el 53,9% de los sufragios se encuentra blindada ante la ignorancia, y no precisa del conocimiento. Gravísimo error conceptual de parte del jefe de Gabinete de Ministros saliente.

Antes, era Néstor Kirchner el encargado de lidiar con los números y, en su lugar, fue reemplazado por Amado Boudou.

Sin embargo, después de la campaña electoral, la Presidente de la Nación mermó la confianza en su compañero de fórmula (¿exceso de protagonismo?) y, ahora, ella prestó oidos a los economistas heterodoxos, responsables de financiar la fuga de divisas (como la titular del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont) y de una improvisación de medidas que despertaron el pánico entre los ahorristas (desde el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, al secretario de Comercio Interior saliente, Guillermo Moreno).
Ni los economistas heterodoxos acercaron una medida interesante para frenar la fuga de divisas ni Amado Boudou creó algo más que fuegos de artificio para desviar la atención de los medios. Así, no se recrea la confianza de los ahorristas.
En la City porteña, todo cambió.

Los banqueros, grandes halagadores de Cristina Fernández y su manejo de la economía ante la crisis internacional (muchos de ellos electores de Ella, mal que le pese a Horacio Verbitsky), lucen preocupados porque han perdido cientos de millones de dólares de ganancias casi puras, sin costo, que dejaba el negocio cambiario.

Ahora, ellos temen presiones (para no decir “corridas”, algo que todavía está muy lejos) sobre los depósitos en dólares y, en menor medida, en pesos. Hay que recordar que el actual sistema bancario es transaccional, tiene demasiada liquidez cedida al BCRA y que los pesos, abundan menos de lo que se dice.
Entre mesas de dinero, cambistas y operadores bursátiles, la realidad es otra.

Volvieron los negocios, ya sean legales o blue; el contado contra liqui (ya sea acciones o bonos) está creciendo; las operaciones a futuro, también; las aperturas de cuenta fueron constante en la semana y viejos clientes han vuelto para buscar consejo o caminos para cambiar su liquidez por dólares.
En la City todavía no pueden creer que el Ejecutivo Nacional, en su intento de frenar la fuga de divisas haya revitalizado, impulsado y alimente, con sus operaciones policíacas, el mercado negro de divisas. No entienden cómo fue que los economistas kirchneristas desconocieron cómo reaccionarían los argentinos ante el corralito verde. Pero lo que más perplejidad les provoca es el deseo de buscar culpables que emana del Palacio de Hacienda.
La semana comenzó con Amado Boudou culpando a 4 empresas de la fuga de divisas, luego él habló de un intento de golpe de mercado y terminó por responsabilizar a Clarín y La Nación.

Marcó del Pont, visitando a Carta Abierta, en la Biblioteca Nacional, no fue menos.

Antes, se anunció la creación de una comisión que nadie sabe cómo desarmará una maraña de subsidios que, según el Presupuesto 2012, deberían llegar a casi $ 100.000 millones, sacando ventajas para un grupos de bancos y empresas por 0,5% del total y la devolución de Subterráneos de Buenos Aires y el premetro a la Ciudad, que insumen poco más de 1,5% del total.

Sin duda, fue un tema para sacar el tema dólar de la tapa de los diarios.
En la primera semana de “corralito verde”, los negocios diarios de divisas en ventanilla cayeron de US$ 600 millones ddiarios a menos de US$ 100 millones, las ventas de divisas del Banco Central pasaron de casi US$ 150 millones por rueda a US$ 40 millones, usando al Banco Nación como opción para que se note menos la merma de divisas.

Además, el contado contra liqui multiplicó por 2 su volumen y la devaluación implícita del peso llegó a 25%, y bajó luego por intervención de la ANSeS.
Con estos números, ningún economista heterodoxo está dispuesto a cantar victoria, pero lejos aún están de apoyarlas.

Todo el oficialismo espera escuchar la opinión a Cristina Fernández para alinearse y obedientemente y repetir los conceptos de la Presidente de la Nación. El temor reverencial que hay en el oficialismo a “sacar los pies del plato” hace que no haya un registro real del impacto que tuvieron en los ahorristas las medidas policíacas.
Por estas horas, la Casa Rosada analiza encuestas para conocer el impacto en la opinión pública de las medidas, el nivel de conocimiento de la noticia y el acuerdo o desacuerdo con el control en la venta de dólares. Las decisiones partirán luego de obtener las conclusiones de los relevamientos.
Un trabajo de OPSM (Enrique Zuleta Puceiro) sostiene que 75% de los argentinos reclamaban, aún antes del “corralito verde” rectificaciones en la economía, contra sólo 13% que asegura que se debe ratificar su política económica
Una de las fantasías de la City y de los votantes de clase media es que los presidentes en problemas, siempre viran al centro.

La historia recuerda que Carlos Saúl Menem dejó a Antonio Erman González por Domingo Felipe Cavallo, a quien reemplazó por Roque Fernández; Fernando de la Rúa suplantó a José Luis Machinea por Ricardo López Murphy y luego por Cavallo. A su turno, Eduardo Duhalde pasó de Jorge Remes Lenicov a Roberto Lavagna.
Sin embargo, Cristina Fernández ya tuvo 2 economistas desarrollistas (Miguel Peirano y Martín Lousteau), un técnico (Carlos Rafael Fernández) y un egresado del CEMA (Amado Boudou). 
Hoy, el ministro de Economía intenta dejar como heredero a Hernán Lorenzino, pero no se le conoce experiencia, más allá del canje de deuda que recibió de manos del Deustche Bank y que logró hacer aprobar por el Ejecutivo. 
Su plan B es Mario Blejer.
El plan C es él mismo, pidiendo licencia al Senado, del que será titular.
Pero ¿y si la rueda de la fortuna gira hacia el otro lado? Hay otras posibilidades para el Palacio de Hacienda: 
> Ricardo Echegaray, aunque dicen que ahora es cuestionado en la interna del FpV;
> Mercedes Marcó del Pont, en el centro de la polémica aunque ella intenta convertirse en la candidata del colectivo Carta Abierta;
> Débora Giorgi, la candidata de José Ignacio De Mendiguren;
> ¿Será Axel Kicillof el elegido? Difícil si se considera que Máximo Kirchner ya le advirtió a La Cámpora que no estará en la 1ra. linea de la Administración que se anuncia. 
De todos modos, la incertidumbre no tiene reglas...
En el gobierno hay más voces que opinan que se debe aumentar la presión policial que las que aconsejan eliminarlas o menguarlas.
Se promueve prohibir la remesas de ganancias de las empresas extranjeras, tomar los encajes en dólares que los bancos depositados en el BCRA, propugnar el pase voluntario de colocaciones en dólares a pesos y dejar de informar sobre las reservas.
Una Presidente de la Nación que acaba de ser felicitada por criticar el anarcocapitalismo no se volverá liberal horas más tarde. Lo que viene es más Estado, es decir, más acción policial, más controles, mercados más vigilados. En pocas palabras, el “corralito verde”, puede crecer.
FUENTE: www.Urgente24.com

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